La Copa del Rey es el torneo con más historia del fútbol español, ya que es el primero que comenzó a disputarse en el país. Desde su origen, en 1903, ha habido catorce clubes diferentes que han conseguido alzar el título. Por otro lado, hasta veinte equipos han sido subcampeones. En este artículo, vamos a repasar, de forma breve, algunos datos sobre finales y participantes.
Al principio, la Copa era conocida como el Campeonato de España, y reunía en él a los mejores equipos de cada región. Es por ello que, a principios del siglo XX, cuando comenzó a disputarse, hay algunos campeones y finalistas que hoy día no imaginamos. Algunos de ellos son el Club de Ciclismo San Sebastián, la Real Sociedad Gimnástica Española de Madrid, o el Español de Madrid, que ya no existen. Hay otros que siguen funcionando en la actualidad, pero probablemente los más jóvenes no sepan que son campeones, como por ejemplo, el Real Unión de Irún, que tiene cinco títulos, o el Arenas de Getxo, que tiene uno.
Si nos centramos en buscar las finales más sorprendentes, revisar las jugadas por el Sevilla es una buena idea. En 1935, ganó su primera Copa al Sabadell, en Chamartín. Cuatro años más tarde, lo hizo contra el Racing de Ferrol por seis a dos, en Montjuic. Hasta la campaña pasada, ambos conjuntos estaban en 1ª RFEF. Sólo el ascenso del club gallego ha roto esta estadística. Ya en época contemporánea, se puede sumar como ejemplo la ganada por los hispalenses ante el Getafe en 2007. Aquel partido supuso la primera final para el equipo madrileño, que el año siguiente volvió a ser subcampeón, pero esta vez contra el Valencia en el Vicente Calderón. Cayeron por tres a uno.
No hay muchos equipos que hayan llegado dos veces a la final, perdiéndola de forma consecutiva. Podemos citar al Sporting de Gijón, que hizo lo mismo que el Getafe bastantes años atrás. En 1981, alcanzó el partido por el título, pero cayó derrotado por el Barça con resultado de tres a uno. Al año siguiente volvió a llegar a la misma situación, pero fue vencido de nuevo. Esta vez, el Real Madrid fue su verdugo. El resultado fue de dos a uno en el Nuevo José Zorrilla de Valladolid.
Por otro lado, el conjunto que más veces ha jugado la final sin poder ganarla es el Celta, que tiene en su haber cuatro subcampeonatos. Que los enfrentamientos en una final se repitan, es algo habitual si juegas con el FC Barcelona, el Athletic o el Real Madrid, que son los que más títulos tienen. Sin embargo, los vigueses se la tienen jurada al Real Zaragoza. Los maños privaron a los celestes de levantar el título en dos ocasiones. La primera de ellas fue en 1994, en el Vicente Calderón, donde los aragoneses triunfaron en los penaltis. En la segunda el resultado fue de tres a uno en contra del equipo gallego.
Para concluir, revisaremos dos finales muy controvertidas en la historia de la Copa. La primera, no la podremos ver de nuevo, ya que en 1980 el Real Madrid se enfrentó al Castilla. Sí, su filial. Por aquel entonces, los “equipos B” podían disputar el torneo. Tan bien lo hicieron los canteranos del equipo blanco que alcanzaron la final que, por supuesto, perdieron. Fue una fiesta merengue, porque además se celebró en el Santiago Bernabéu. Acabó con resultado de seis a uno para el primer equipo. Eso sí, los jóvenes madridistas disputaron al año siguiente la Recopa de Europa, episodio que merecerá su artículo algún jueves de Europa League.
La otra final a la que haremos referencia es la que enfrentó al RCD Mallorca y al Recreativo de Huelva, en 2003. El Decano del fútbol español llegó al partido decisivo por primera vez en su historia, aunque no pudo hacer frente al conjunto balear, que alzó su único título copero, gracias al tres a cero que cosechó en el Martínez Valero de Elche. Se recuerda como una de las finales menos vistas de la historia de la Copa del Rey, y la selección de la ciudad alicantina como sede se puso en tela de juicio.
Años más tarde, cuando la RFEF implementó en 2019 el cambio de formato, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, recordó este encuentro para criticar la reforma, pues no le pareció una final atractiva. Sin embargo, por lo que siempre se ha caracterizado este torneo es la variedad de equipos que llegan a las fases decisivas. Aunque está claro que una final entre el FC Barcelona y el Real Madrid tendrá más audiencia, nada es comparable a la emoción de jugar una final, como la que aquellos aficionados del Mallorca y del Recre sintieron aquel 28 de junio de 2003.