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Eden Hazard: de superestrella a “estrellado”

Eden Hazard ha publicado una carta, en su cuenta personal de Instagram, anunciando su retirada del fútbol profesional. En ella, ha agradecido el trato recibido, tanto por los clubes donde ha militado, como por los aficionados. El inicio comenzó este verano, al rescindir el año de contrato que le quedaba con el Real Madrid. A lo largo del mercado veraniego se le relacionó con Botafogo, con algún equipo de la MLS e, incluso, con su regreso a Bélgica. Con el paso de las semanas, aumentaban los rumores. Además, su hermano Kylian realizó, hace pocos días, unas sorprendentes declaraciones. En las mismas, insinuaba la posible salida de los terrenos de juego.

Su carrera profesional comenzó en Bélgica, en el Royal Stade Brainois. En este equipo se formó hasta el 2003, momento en el que fichó por el Tubize. A sus 14 años llamó la atención del Lille, donde continuó formándose en la academia del equipo francés. Su debut en la Ligue 1, con apenas 16 años, llegaría el 24 de noviembre de 2006. Su enorme calidad le llevó a ser una de las piezas fundamentales para Rudi García. Con este técnico consiguió el título de liga y la Copa de Francia en la temporada 2010/11. Tras cinco temporadas con Les Dogues, recaló en las filas del Chelsea.

El equipo inglés apostó por un jugador candidato a conseguir grandes retos, e incluso a ser nominado a títulos personales como el Balón de Oro. Hazard maravilló a los aficionados del Chelsea, donde se convirtió en uno de los mejores jugadores de su historia. En sus siete temporadas como blue, el belga levantó en dos ocasiones la Europa League. Además, se proclamó campeón de la Premier League, FA Cup y de la Copa de Inglaterra. También formó parte de la mejor generación de la Selección de Bélgica. Lástima que no pudieran cristalizarlo con la consecución de algún título. Su mayor logro fue el tercer puesto conseguido en el Mundial de 2018. En esta cita mundialista, Hazard fue de los jugadores que más “brillaron”.

Su peor etapa como profesional llegaría en 2019, tras su fichaje galáctico por el Real Madrid. Fue la compra más cara de la historia del club blanco. Pero nunca pudo alcanzar el nivel mostrado en su etapa en el fútbol inglés o francés. La lesión, ante el PSG, marco su etapa como madridista. A raíz de este momento, la falta de continuidad lastró su sueño de ser una estrella blanca. Tras 562 partidos jugados, 159 goles y 82 asistencias, la historia del jugador belga toca a su fin.

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