Se ha convertido en algo habitual en el Santiago Bernabéu. Cada vez que Joselu juega en LaLiga, el canterano acaba anotando. El último precedente fue ante Osasuna. El gallego marcó el último gol del encuentro, tras una asistencia de Vinicius. Era su quinto gol en el torneo, el cuarto en el Bernabéu. En su época de canterano marcó en dos ocasiones con el primer equipo. Una década después, la historia continúa. Su ritmo goleador le mantiene en la lucha por el Pichichi.
Todos los goles de Joselu han sido en competición doméstica. Como local anotó ante Real Sociedad, Getafe, Las Palmas y Osasuna. Sin embargo, de visitante sólo consiguió ver portería frente al Girona. A pesar de su rol de suplente, siempre que juega de titular acaba marcando. A diferencia de Mariano o Jovic, ha sabido entender su papel en el vestuario. En tan solo nueve jornadas ligueras, ya ha conseguido superar los números de sus antecesores.
Si continua con este ritmo goleador, alcanzaría los 21 goles a final de temporada. Presenta un promedio de 0,56 goles por partido. Estadística similar a la del anterior Pichichi de LaLiga: Robert Lewandowski. El atacante polaco ha anotado cinco goles en ocho partidos jugados (0,62 por partido). Algo superior es la marca que tiene el actual máximo goleador liguero, Jude Bellingham. El atacante británico ha anotado ocho tantos en un total de ocho encuentros disputados. Por lo tanto, presenta un promedio (1 gol por partido) a la altura de muy pocos jugadores.
De esta forma, el jugador convocado con la Selección Española, se ha convertido en el segundo máximo anotador de la competición liguera. Igualado con Morata, Kubo y Lewandowski. Precisamente, el delantero del atlético, posee la mayor cifra goleadora (14 goles) sin gozar de la titularidad. Ocurrió en la temporada 2016/17, cuando aún militaba en el Real Madrid. El gen competitivo, el carácter y la ambición de Joselu serán fundamentales para superar este registro a lo largo de la temporada. Uno de los retos más importantes a lo largo de su carrera deportiva.