La montaña rusa que se generó, tras el golpe sufrido por Camavinga, en el entrenamiento con la Selección de Francia, llega a su final. Uno que, en esta ocasión, no es para nada feliz. El Real Madrid confirma la lesión de gravedad sufrida por el francoangoleño, algo que ensombrece el panorama.
El comunicado del club señala: “Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro jugador Eduardo Camavinga por los Servicios Médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado una rotura del ligamento lateral externo en su rodilla derecha. Pendiente de evolución”.
Previamente, los Servicios Médicos de la Selección de Francia no atinaban con la situación de Camavinga. Tras el golpe sufrido y las dudas generadas por los gestos de dolor del jugador, la primera información es que no era más que un susto. Sin embargo, horas después, todo ese optimismo inicial se evaporaba, más aún, cuando le liberaron de la concentración francesa. A partir de ahí, los temores alzaron vuelo, aunque lo mejor era esperar su llegada al Real Madrid. La confirmación de la lesión no pudo ser peor. Lo que para Francia era un esguince terminó siendo una rotura de ligamento…
Ahora, de nuevo, Carlo Ancelotti y su cuerpo técnico deben resolver una complicada situación. Hablamos de un Camavinga cuya característica principal es la versatilidad. Esa que le permite jugar en varias posiciones del campo y siempre destacar en cada una de ellas. Ante diversas lesiones de sus compañeros, él siempre ha sido un comodín muy importante, que el italiano utiliza con regularidad. Y, lo más importante, sin desentonar en ninguna de ellas. Ahora, la plantilla del Real Madrid pierde esa importante característica, pero con un agravante más, la lesión de Tchouameni. Y, si por esto fuera poco, Vinicius Júnior, a falta de confirmación médica, también cayó lesionado.
Tal vez, lo más seguro es que Ancelotti acuda a Toni Kroos para cubrir la posición de mediocentro defensivo. Algo que, probablemente, genere que el alemán juegue junto a Luka Modrić, una situación no muy frecuente en la presente campaña. El tema es que el croata no suele jugar después de los parones de selecciones. Pero, con Ceballos, Tchouameni y Camavinga afuera, las opciones son reducidas. Hay otra remota opción que sería la de colocar a David Alaba, a sabiendas que su puesto como central puede cubrirlo Nacho. Todo esto sin descartar la irrupción de algún canterano. De todas formas, por ahora, todas estas no son más que puras conjeturas. Seguramente, el italiano sorprenderá a propios y extraños.
Toda lesión que genere ausencia de un jugador de los terrenos de juegos es lamentable, sin importar de quien se trate. Y, si se da en un contexto como el que tiene el Real Madrid, peor aún. No hablo solo de la cantidad de efectivos que causan baja, sino del momento de la temporada. Porque, si bien es cierto, aún falta mucho camino por recorrer, este es uno de esos momentos que puede marcar el futuro.
Al regreso del parón habrá dos objetivos muy importantes. El primero, certificar el primer lugar del grupo en la Champions League. El segundo, ganar en LaLiga para mantener opciones de recuperar el liderato. Y, en enero, la Supercopa de España. Veremos qué esquema presenta Ancelotti y cómo responde el resto de la plantilla porque lo que se viene, no es poca cosa. Eso sí, sin olvidar ese algo que a unos cuantos escuece, eso que algunos llaman ADN. En cuanto a Camavinga, desde acá le enviamos nuestros mejores deseos para una pronta y exitosa recuperación.