Era el objetivo y ¡vaya que lo cumplieron! El Real Madrid consigue cerrar un octubre muy complicado, manteniendo los lideratos de LaLiga y la Fase de Grupos de la Champions League. Y ¡qué mejor!, que conseguirlo con una victoria en un Clásico, con remontada incluida y gol en el minuto 92’. El uno a dos brilló en Montjuic y, si bien es cierto, Bellingham hizo un partido soberbio con sus dos anotaciones, también lo es que Luka Modrić entró en el segundo tiempo para cambiarlo todo. Su partido 500 con la camiseta merengue tuvo un guión de película y, a él, como uno de los grandes protagonistas.
Precisamente, al culminar el Clásico contra el FC Barcelona, Modrić habló de ese ‘500’ y su significado para él: “No sé ni qué decir. Me siento muy orgulloso de haber representado a este club tantas veces. El 500 es muy especial y hacerlo contra un rival tan grande, un Clásico, no puedo pedir más. Estoy muy contento de vivir esto, jugar en el club más grande de la historia”.
Acerca del partido, el croata apuntó: “Mostramos nuestro carácter: nunca rendirse, ir hasta el final. Jugamos una gran segunda parte y lo merecimos. Cumplir 500 partidos ganando un Clásico… no se puede pedir más. ¡Qué 500 son muchos! No soy ni consciente de lo que estoy consiguiendo en el Real Madrid”.
Luka Modrić no podía ocultar su emoción: “Es que estas cosas te llenan. No es fácil llegar a esta cifra, me siento muy orgulloso y contento de llegar a estas cifras. Y de llevar el brazalete, algo que me ha dado Ancelotti en el segundo tiempo. Muy feliz”.
El croata también habló de Bellingham: “Parece que llevase mucho tiempo aquí, no tres meses. Como se dice en España, cayó de pie. Derrocha personalidad, carácter. No es casualidad que se haya adaptado tan bien. Es un chico top, con un talento extraordinario. ¡Yo creo que ni él se cree que lleve tantos goles! Hay que preguntárselo. Felicitarle y que siga. ¡No puede bajar el ritmo, eh!”.
Y, de la remontada: “Creer hasta el final. Jamás rendirse. Hicimos eso. Muy contentos de conseguir esta victoria, pero debemos seguir, que queda muchísima Liga”.
Ya Ancelotti lo había asomado en la previa, más aún, con un Luka Modrić que había jugado los 90 minutos en el anterior encuentro, entresemana, en la Champions. Y cuando le preguntaron por supuestas explicaciones a los jugadores, el italiano aseguró: “Todos son profesionales y no piden explicaciones”. Algo de lo que el croata hace honor al afirmar lo feliz que se encontraba por “llevar el brazalete, algo que me ha dado Ancelotti en el segundo tiempo”. Así que, amigos fanáticos del clickbait, dejen de buscar fantasmas donde no los hay. Hablamos de profesionales y de un jugadorazo con ADN merengue. Tampoco hay que buscarle la quinta pata al gato. Modrić es jugador del Real Madrid, es un fenómeno que cambió el curso del encuentro y seguirá siendo merengue hasta que él quiera. Así que, punto y final.